En el mundo, un tercio de la producción de alimentos no se llega a consumir.
Significa más de mil millones de toneladas de comida anualmente.
Este desperdicio, cuesta a la economía global 940 mil millones de dólares.
Generando el 8% de las emisiones de gases de efecto invernadero.
DECCO, más de 90 años protegiendo frutas y verduras
Nos orgullece nuestro legado en la postcosecha y el conocimiento que hemos acumulado a lo largo de los años para ofrecer soluciones innovadoras.
Con nuestro trabajo, cada día conseguimos que haya más y mejor frutas y verduras frescas para el mundo
Cada año más de 15 millones de toneladas de frutas y verduras son protegidas por DECCO.
DECCO trabaja en colaboración directa con los mayores exportadores y productores de frutas y verduras en el mundo, para ayudar reducir el desperdicio de alimentos y potenciar la frescura en cada etapa de la cadena de suministro.
Somos Globales y Locales
Presentes en
40 países
200 colaboradores
que están en contacto con productores, centrales hortofrutícolas y exportadores de frutas y verduras.
DECCO ofrece soluciones para cada etapa de la cadena agroalimentaria
DECCO entrega valor cada día a los productores, centrales hortofrutícolas, exportadores hasta la gran distribución y los minoristas.
Nearharvest
Productos de protección solar para reducir el estrés causado por la temperatura/sequía y la radiación UV
Plantas de Empaque
Desinfección y limpieza antes de la aplicación de recubrimientos para reducir la deshidratación y el podrido. Fungicidas biológicos y convencionales para prevenir el podrido.
Conservación
Productos para la conservación para evitar el podrido, la pérdida de frescura y reducir la brotación.
Transporte
Desinfección, control de etíleno y podrido. Monitorización mediante datos para los cambios de temperatura.
Exportación
Desinfección, control de etíleno y podrido. Monitorización global mediante datos para la mayoría de los mercados principales de exportación.
Centros de distribución y supermercados
Desinfectantes para reducir esporas y controlar los patógenos derivados de humanos o plantas en las cámaras de conservación.
